En mayo del 2021, subimos nuevamente en expedición a Los Mallines, para ir a revisar las cámaras, reposicionar las baterías y tarjetas de memoria. La expedición fue un éxito total y nos dejó llenos de alegría y esperanza. Cuando logramos visualizar los registros no podíamos creer lo que veíamos. Gritamos de alegría, saltamos de felicidad. Nos abrazamos y no dejábamos de sonreír.
Lo primero que vimos en imágenes fue el torso de un huemul, al no poder ver su cabeza no pudimos reconocer si correspondía a un macho o una hembra. Luego en los siguientes registros distinguimos a dos individuos distintos. Parecía ser una familia de huemules. Distinguimos un ejemplar con astas de dos puntas, propias de un macho adulto, y otro sin las astas, pero con los botones en desarrollo, lo que también indica que es un macho, pero juvenil.
Quedamos muy felices de este hallazgo, ya que hasta el momento, Jungla Peumayen tiene las condiciones para albergar al menos un grupo familiar de huemules durante el verano y otoño.
Ahora el desafío es controlar las amenazas del huemul y aumentar el esfuerzo de monitoreo mediante la instalación de más cámaras trampa para lograr cubrir un área mayor de monitoreo y poder hacer un seguimiento mas detallado de los huemules de Jungla Peumayen.
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